sábado, 29 de marzo de 2014

El martillo de Dios

Jeremías 23:29
¿No es mi palabra como fuego, dice Jehová, y como martillo que quebranta la piedra? 

Desde el primer momento que empezamos a marchar en este camino se me enseñó que TODO se hace en el marco de la escritura. 

La palabra es la que derrite el corazón del pecador, la predicación es la que rompe la piedra del corazón incrédulo; Hoy lamentablemente vemos como muchos lugares han querido implementar "métodos " para "atraer" a las personas a la congregación. ES UN ERROR.

Cuántos conoce usted ? y cuántos conozco yo? que pasaron frente a un altar o tarima a "hacer una confesión de fe" luego de SER IMPRESIONADOS en uno de estos eventos; llámese concierto, pantomimas, dramas, etc. Que al pasar el tiempo y luego que aquella EMOCIÓN se les va de sus vidas vuelven a ser las mismas personas. Casi´ninguno permanece en la congregación, y los que se mantienen no se les ve frutos. CIERTO O FALSO?

Una siembra artificial nunca dará frutos genuinos; Hay muchos lideres que sinceramente y con "buenas intenciones" lo hacen, pero quién salva? Dios o el hombre?.

No es cuestión de métodos modernos ni de maquinarias para atraer personas a una religión,es cuestión de volver al fundamento Bíblico de la oración y la predicación de la palabra genuina.

LO SUPERFICIAL HA GANADO MUCHO ESPACIO EN LOS PÚLPITOS, ES HORA DE MIRAR ATRÁS Y VOLVER AL EVANGELIO ÚNICO Y VERDADERO.

Pablo frecuentemente decía MI EVANGELIO; pero no era porque el haya metido su mano o haya hecho un aporte, sino porque el evangelio le corría por la sangre, lo respiraba y lo VIVÍA a plenitud. Por ello es el ministerio de mas frutos en la historia de la Iglesia. Quieres ver la mano de Dios moverse en medio del ministerio, de la congregación?, sigue el camino trazado por la escritura.

LA INTIMIDAD CON DIOS TRAE FRUTOS VERDADEROS.

2da. a los Corintios 6:4-7
antes bien, nos recomendamos en todo como ministros de Dios, en mucha paciencia, en tribulaciones, en necesidades, en angustias;
en azotes, en cárceles, en tumultos, en trabajos, en desvelos, en ayunos;
en pureza, en ciencia, en longanimidad, en bondad, en el Espíritu Santo, en amor sincero,
en palabra de verdad, en poder de Dios, con armas de justicia a diestra y a siniestra

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