sábado, 4 de octubre de 2014

¡No basta con admirar a Cristo!

“Y cuando terminó Jesús estas palabras, la gente se admiraba de su doctrina.”
Mateo 7:28

La resurrección de nuestro Señor Jesucristo dividió la historia,  tanto que el calendario humano se divide en años antes y después de Cristo; su nombre ha sido motivo de esperanza en quiénes hemos conocido su gloriosa obra por medio de las escrituras; pero aún entre quienes niegan su divinidad y en las sectas religiosas el nombre de Jesús y su vida ha generado admiración; políticos, famosos, historiadores,  etc. han tomado su bendito nombre y lo han usado como ejemplo o motivación. ¿Ahora bastara para la humanidad admirar al Señor? ¿Su vida terrenal y sacrificio en la cruz tenían la simple misión de generar aplausos y admiración?

Motivados pero sin compromiso:
La cita con la que iniciamos este escrito es la ocasión en la que Jesús finalizando de predicar en el monte de las bienaventuranzas recibió muestras de admiración de todo aquel grupo grande que se había congregado a oír sus maravillosas enseñanzas, al descender del monte dice que las gentes le seguían y en los días siguientes fueron testigos de múltiples señales y milagros obrados por Cristo; la sanidad de un leproso (Mateo 8:3), la sanidad de un paralitico atormentado (Mateo 8:13), la liberación de muchos endemoniados (Mateo 8:16), hasta el momento la multitud seguía sin perder huella del camino del Señor;  pero llegó una noche en la que El Señor dio la orden de pasar al otro lado, y aunque aquella gente tenía la intención de seguirle, al escuchar lo que Jesús demandaba para seguirle algunos comenzaron a poner excusas, otros quizás le dieron prioridad a los negocios y otros según su conveniencia empezaron a desaparecer de aquel grupo que ya no era tan masivo. La orden del Señor de cruzar al otro lado seguía en pie y de aquella masa humana solo sus discípulos le obedecieron y siguieron.

Hoy esta historia se repite, muchos al ver señales y milagros sufren alteraciones en sus emociones, se maravillan del poder de Dios y al comienzo muestran un aparente compromiso, pero cuando llega la demanda de dejar todo atrás por la causa del evangelio, LAS ESCUSAS EMPIEZAN A SONAR.
Hoy con frecuencia vemos como muchos responden al llamado desde un altar luego de algún servicio de predicación, se ven emocionalmente alterados ya sea con lágrimas o gestos de impresión, ¿PERO AL PASAR DEL TIEMPO CUANTOS PERSEVERARON, CUANTOS RINDIERON SUS VIDAS AL SEÑOR, CUANTOS HAN DADO FRUTOS DIGNOS DE UN ARREPENTIMIENTO Y CONVERSIÒN GENUÌNA?


Los religiosos también se  admiran:
“Aquel día vinieron a Él los saduceos…Oyendo esto la gente, se admiraba de su doctrina.”
Mateo 22:23 y 33

Aunque hemos citado solo el inicio y final de este pasaje, podemos leer en su contexto que esta es la ocasión en la que Jesús estando en el templo proclamó varias enseñanzas y vinieron al templo una representación de la secta religiosa más importante de aquella época, los saduceos junto con el resto del pueblo luego de escuchar la doctrina del Señor se admiraban de tales palabras; pero en vez de guardarlas en su corazón y ponerlas por obras, intentaron buscar alguna ocasión para hacerle caer, aquellos religiosos serían los que algún tiempo más tarde entrarían en consejo para prenderlo y aquellas gloriosas enseñanzas las torcerían para perdición suya y el resto de la población.

Cualquier parecido no es casualidad, durante todas las épocas los grandes líderes religiosos han tomado las enseñanzas Bíblicas y las han trastornado a gusto suyo para condenación de millones, se presentan como los grandes portadores del mensaje sagrado, con aspecto religioso y auto proclamándose representantes de Cristo; tales sectarios han perpetrado atrocidades que han enviado a la condenación eterna a mares de gentes en diferentes épocas. ADMIRADOS CON CRISTO, TRAICIONANDO SUS ENSEÑANZAS.


Aunque podemos hallar más evidencias Bíblicas  que nos muestran como muchos grupos mostraron admiración de Cristo y sus enseñanzas, muchos lo tomaron como un milagrero, otros como filósofo y otros que aun reconociendo su señorío no le siguieron. AMADO AMIGO Y HERMANO NO BASTA CON ADMIRAR AL SEÑOR, NO BASTA CON ESCUCHAR HIMNOS CRISTIANOS, NO BASTA CON CONMEMORAR UNA VEZ AL AÑO ALGUNA FIESTA RELIGIOSA, DEBES SEGUÌR A CRISTO;.SERVIRLE, ENTRONARLE COMO TU REY, ADORARLE COMO TU DIOS, OBEDECERLE COMO TU SEÑOR.

Simpatizantes y religiosos lo admiraron, los discípulos LE OBEDECIERON!


Otras citas para leer:
Marcos 1:22
Marcos 6:2
Lucas 4:32
Lucas 9:43

Se despide en El Señor tu amigo y Hno. David Criollo

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